Orozco.
Fue allá por Octubre del 2000, cuando finalizaba su gobierno, cuando a Rafael Hernández Villalpando, le retiraron el fuero constitucional en el Congreso de Veracruz.
En ese entonces, el alcalde fue acusado de bigamia, golpear a su esposa, peculado, abuso de autoridad y ejercicio indebido de la función pública.
Aunque más tarde en el 2005 reapareció del exilio declarando ante medios de comunicación que fue exonerado de toda culpa, el antecedente se quedó para la historia, como el presidente municipal que perdió el fuero y no culminó su trienio al frente de Xalapa.
Hoy este personaje busca la diputación federal por Xalapa Urbano, con más canas de complexión delgada. Sonriente camina por las calles de la ciudad pidiendo el voto a la ciudadanía, a las nuevas generaciones que no lo conocen e ignoran su paso por la política veracruzana.