Hilda Hermida Delgado.- Aunque hubo piso disparejo en el proceso de renovación de la secretaría general del SNTE 56 en Veracruz, el aspirante Leonardo Campos Aparicio señaló que el ánimo del magisterio es ejercer su voto libremente en el proceso histórico que esta por ocurrir el próximo 1 de abril.
En entrevista previa a su evento de pre cierre de campaña en Xalapa, el maestro indicó que sus compañeros no quieren lideres morales que pretendan ponderarse en las siglas del sindicato, si no, un representante que de verdad los escuche y se preocupe por los intereses de todos.
Agregó, que aunque la actual dirigencia del SNTE 56 Veracruz, comenzó a hacer campaña desde el año pasado con su candidato oficial y utilizando el dinero de todos; esto mismo generará que en la votación se decidan por un cambio, el que ofrece la planilla blanca.
“Hoy nos da la oportunidad nuestra norma estatuaria y la norma federal, poder elegir a nuestros representantes. La votación es el próximo 1 de abril, vamos a llenar las urnas a favor de la planilla blanca”, expresó.
Campos Aparicio, agregó que los maestros nunca le perdonarán a la dirigencia haber dirigido sus recursos para favorecer intereses propios, por ello aseguró que usarán el poder de elección para dejar atrás ese tipo de prácticas.
“Nosotros no tenemos financiamiento de ninguna índole ni de ninguna especie, otros proyectos, el oficial andan con recursos de los compañeros, de las cuotas, desde hace meses, y eso no se lo van a perdonar, es lo lamentable y lo penoso”.
Leonardo Campos, hizo un llamado a realizar una jornada de votación transparente, a no agredir el derecho de cada uno de los compañeros agremiados, los cuales son más de 25 mil, “no andamos con camiones, ni jalando gente, aquí estamos todos los que quieren estar, no por nada nos dicen que somos el candidato de las bases”.
Finalmente, dijo que en el actual proceso no detectó la intromisión de las autoridades de la Secretaría de Educación de Veracruz, como lo ha expuesto aspirantes de la SNTE 32, pero si, reiteró, el despilfarro del dinero del organismo para esta actividad proselitista.
