En esta pandemia, no se ha visto solo lo duro, también lo tupido; sin embargo hay cosas positivas dentro de la jornada de “Sana Distancia” que se emprendió en escuelas veracruzanas desde el pasado 23 de marzo.
Los estudiantes no solo están siendo protegidos del virus que tiene paralizado al mundo, también de las agresiones lascivas, aberrantes, que los maestros ejercen contra sus alumnos.
Desde el 2019, ha surgido un gran valor entre el alumnado y padres de familia, por denunciar a los docentes que han cometido este tipo de fechorías a niños de preescolar y todos los niveles, y por primera vez se está haciendo justicia.
En últimas declaraciones del titular de la Secretaría de Educación de Veracruz , Zenyazen Escobar García, con fecha del 4 de marzo del año en curso, informó que se han registrado 21 denuncias por acoso de parte de maestros y personal administrativo a estudiantes, de los cuales 19 ya han sido cesados y cinco actualmente están en la cárcel.
Hay que mencionar, que dentro de la información que ha proporcionado a medios de comunicación, se ha confirmado la simulación que en pasadas administraciones se permitía únicamente reubicando al docente o trabajador del plantel, eliminando por completo el derecho de la víctima de obtener justicia y poniendo en riesgo a futuras víctimas en las escuelas.
El apoyo total a los niños y estudiantes ha permitido que las familias dejen de callarse estos crímenes contra la niñez y eso, lamentablemente solo ha pasado en la actual administración de la SEV, y expreso lamentable, por las cientos o miles de víctimas que en el pasado tuvieron que conformarse con una reubicación de su agresor y no con la cárcel.
En fin, como dije al inicio, la actual pandemia ha hecho ver la suerte de muchos ciudadanos en lo económico y en la salud; pero también, ha protegido en estas semanas a los estudiantes de este tipo de fechorías orquestadas por quienes tienen la responsabilidad de educar a la niñez, y en cambio la dañan de manera permanente.
Nos resta esperar que en meses, años venideros, este tipo de situaciones en los planteles educativos no se den, que la actuación de parte de autoridades educativas en el tema sea un inhibidor para los enfermos sexuales disfrazados de educadores, y sí se da, que el secretario Zenyazen escobar continúe ejerciendo mano dura contra quienes se atrevan a lastimar la inocencia estudiantil veracruzana.